Las sartenes son un utensilio esencial en nuestra cocina, pero a menudo se ven afectadas por las temidas manchas negras. Si has estado lidiando con estas manchas y no sabes cómo quitarlas de manera efectiva y sencilla, ¡has llegado al lugar correcto! En este artículo, te contaré varios métodos para devolverle a tus sartenes su esplendor original.
Método 1: Bicarbonato de sodio y agua
El bicarbonato de sodio es un aliado poderoso en la lucha contra las manchas. Es fácil de usar y muy efectivo.
- Mezcla 3 cucharadas de bicarbonato de sodio con agua hasta formar una pasta.
- Aplica la pasta sobre las manchas negras y frota suavemente con una esponja.
- Deja actuar durante 10-15 minutos.
- Enjuaga con agua caliente y seca bien la sartén.
Método 2: Vinagre blanco y sal
El vinagre blanco y la sal son otra combinación potente para eliminar manchas difíciles.
- Calienta un poco de vinagre en la sartén a fuego medio.
- Agrega 2 cucharadas de sal y mezcla bien.
- Deja que la mezcla hierva durante unos minutos.
- Retira del fuego y frota con una esponja suave.
- Enjuaga con agua caliente y seca.
Método 3: Limón y bicarbonato
El limón es un excelente limpiador natural que, combinado con bicarbonato, puede hacer maravillas.
- Exprime el jugo de un limón sobre las manchas.
- Espolvorea bicarbonato de sodio sobre el jugo.
- Frota con una esponja hasta que las manchas se disuelvan.
- Enjuaga con agua caliente y seca.
Método 4: Detergente para platos y agua caliente
El detergente para platos es un método clásico que nunca falla.
- Llena la sartén con agua caliente.
- Agrega unas gotas de detergente para platos.
- Deja reposar durante 30 minutos.
- Frota con una esponja y enjuaga bien.
Método 5: Crema de tartar
La crema de tartar es otro producto efectivo para eliminar manchas en sartenes.
- Mezcla 2 cucharadas de crema de tartar con agua para formar una pasta.
- Aplica la pasta sobre las manchas y deja actuar durante 30 minutos.
- Frota con una esponja y enjuaga con agua caliente.
RESUMEN
- Método 1: Bicarbonato de sodio y agua.
- Método 2: Vinagre blanco y sal.
- Método 3: Limón y bicarbonato.
- Método 4: Detergente para platos y agua caliente.
- Método 5: Crema de tartar.